Acompañamiento terapéutico
de persona a persona
vínculo terapéutico
Te ofrezco un acompañamiento terapéutico de persona a persona, en el que puedas sentir un espacio seguro que te ayude a restablecer la conexión contigo y tus relaciones.
Un espacio terapéutico en el cual la base es el vínculo, la presencia que unifica el encuentro de persona a persona.
En vínculo, te veo y conecto con lo que vives. Esto facilita que puedas verte y reconocer lo que te resulta difícil ver en ti.
Sé lo importante que es sentirte vista/o y recibir ayuda en lo que necesitas. El ser vista/o permite verse a sí misma/o. Es la base para facilitar que despiertes tu ‘ser persona’: tu capacidad de autoobservación y reconocimiento de ti, de tu capacidad para vivir de manera constructiva.
El vínculo terapéutico facilita conocerte en profundidad y que descubras que puedes relacionarte de manera honesta contigo misma/o y con los demás.
proceso terapéutico
Hace unos años, una amiga de mi abuela Petra me contó: “cuando íbamos al lavadero, lavaba mi sábana recogida y tu abuela me decía: ¡Paula, extiende la sábana, que todas tenemos remiendos!”
Te ofrezco un espacio que facilite el contacto con tus fortalezas: corporales, cognitivas, relacionales, afectivas, creativas… así como el reconocimiento de apoyos internos y externos.
Que te ayude a cultivar tu reconocimiento, tu autocuidado y tu capacidad de estar a favor de ti, de tu camino de vida, que puedas darte valor y recuperar tu confianza.
Un espacio en el que descubrir una base desde la que acercarnos de manera constructiva y segura a nuestro personaje: esa parte que hemos construido desde la desconexión de nuestra esencia y que mantenemos como defensa para no conectar con el dolor.
Para ello, necesitamos reconectar con nuestra vivencia emocional, que habla en lenguaje de sensaciones, emociones e imágenes. Aprender a escucharla, a conocerla y a cultivar la capacidad de acompañarnos en lo que vivimos, de poder estar en contacto con sensaciones intensas.
Contactar con lo profundo, sintonizando con nuestro cerebro más inconsciente, que guarda somáticamente nuestras experiencias pendientes de integrar.
Cultivar la sensibilidad de percibir los movimientos internos desde la consciencia observadora y compasiva, que permite vivir de manera integrada la experiencia antes disociada y actualizar las percepciones condicionadas para encontrar nuevos significados.
Dar voz y movimiento a la vida que pulsa desde el interior activando el movimiento de la energía estancada que necesita expresarse, liberarse y recuperar el fluir energético y vital.
Dar espacio y profundidad a la vivencia de las cualidades naturales de alegría, creatividad, amor, libertad, espontaneidad y coraje.
enfoque terapéutico
Aporto un enfoque integrativo que asume la interrelación fluida entre lo que somos:
lo corporal, afectivo, cognitivo, conductual, relacional, transpersonal…
Me acompañan distintas herramientas que permiten la creación de un espacio terapéutico
que englobe a la persona: un vínculo de persona a persona.
Entre ellas, destaca la bioenergética, que es una terapia psicocorporal que ayuda a liberar la energía bloqueada en el cuerpo, a recuperar el fluir emocional y a conectarnos más profundamente con lo que somos.
Comenzó con Wilhelm Reich (discípulo de Freud), quien descubrió que para no expresar lo sentido disminuimos la respiración al mínimo y endurecemos, acorazamos el cuerpo. Continuó con Alexander Lowen, con cuyo discípulo, Luis Pelayo, he realizado una formación en personterapia bioenergética corporal.
A través del enraizamiento, de liberar la respiración y de dar espacio al movimiento vital que pulsa internamente, recuperamos la vitalidad, creatividad y salud intrínsecas de la vida que somos. La bioenergética ayuda en el propósito de vivir en profundidad, en unidad con la vida y con sus manifestaciones.
La personterapia de Luis Pelayo “enfoca al ser humano como un uno, como un todo, con necesidad de funcionamiento armónico, en sus relaciones consigo mismo, con los demás, con el entorno” y define al ‘ser-persona’ como “ser humano con cuerpo, mente, sentimientos, emociones, necesidad de relacionarse, mismidad yoica, capacidad de bucear en la experiencia, interiorizarse y exteriorizarse, en sintonía e integración”.
La personterapia es un arte, una comunicación en profundidad en la que descubrir nuestro ser y liberar lo que no somos.
En palabras de Luis Pelayo, “en la profundidad del ser es donde están las fuerzas organizadoras de la existencia armónica integrada”.
La psicoterapia somática, en la cual me formo actualmente en la escuela de Somatic Experiencing de Peter Levine, es un enfoque psicobiológico cuyo objetivo es la resolución del trauma físico y emocional así como el estrés postraumático. Su herramienta principal es la ‘sensopercepción’ o sensación sentida, que nos ayuda a restablecer la conexión, la autoregulación y la integración de las vivencias traumáticas.
También forman parte del abordaje terapéutico que ofrezco la Medicina Integrativa y Salud Vital, la psicología Gestalt, Sistémica y Transpersonal.
Entre ellas, destaca la bioenergética, que es una terapia psicocorporal que ayuda a liberar la energía bloqueada en el cuerpo, a recuperar el fluir emocional y a conectarnos más profundamente con lo que somos.
Comenzó con Wilhelm Reich (discípulo de Freud), quien descubrió que para no expresar lo sentido disminuimos la respiración al mínimo y endurecemos, acorazamos el cuerpo. Continuó con Alexander Lowen, con cuyo discípulo, Luis Pelayo, he realizado una formación en personterapia bioenergética corporal.
A través del enraizamiento, de liberar la respiración y de dar espacio al movimiento vital que pulsa internamente, recuperamos la vitalidad, creatividad y salud intrínsecas de la vida que somos. La bioenergética ayuda en el propósito de vivir en profundidad, en unidad con la vida y con sus manifestaciones.
La personterapia de Luis Pelayo “enfoca al ser humano como un uno, como un todo, con necesidad de funcionamiento armónico, en sus relaciones consigo mismo, con los demás, con el entorno” y define al ‘ser-persona’ como “ser humano con cuerpo, mente, sentimientos, emociones, necesidad de relacionarse, mismidad yoica, capacidad de bucear en la experiencia, interiorizarse y exteriorizarse, en sintonía e integración”.
La personterapia es un arte, una comunicación en profundidad en la que descubrir nuestro ser y liberar lo que no somos.
En palabras de Luis Pelayo, “en la profundidad del ser es donde están las fuerzas organizadoras de la existencia armónica integrada”.
La psicoterapia somática, en la cual me formo actualmente en la escuela de Somatic Experiencing de Peter Levine, es un enfoque psicobiológico cuyo objetivo es la resolución del trauma físico y emocional así como el estrés postraumático. Su herramienta principal es la ‘sensopercepción’ o sensación sentida, que nos ayuda a restablecer la conexión, la autoregulación y la integración de las vivencias traumáticas.
También forman parte del abordaje terapéutico que ofrezco la Medicina Integrativa y Salud Vital, la psicología Gestalt, Sistémica y Transpersonal.
testimonios
Florecer(me) desde las raíces 🌺
Gracias a ti me he enraizado
con los pies en la tierra,
Me he enraizado en lo que soy,
Me he enraizado en vivir el ahora
Vivir el ahora y
ver florecer(me)
En Aquella semillita
Que riegas, y has regado con cariño
Y ver florecer(me)
es gracias a ti,
al espacio que creas,
al abrazo constante,
a la fuerza que haces vibrar
Y a la vibración que haces fuerza,
Desde las raíces.
Para mí, este proceso terapéutico es un proceso de apertura a la vida, a través del cuerpo sentir sensaciones, sentir emociones me va dando conciencia de ser y despertando el deseo de darme amor y dándomelo, voy abriéndome a dar y recibir amor de los demás, a amar la vida y sentir que la vida también me ama.
Desde hace un tiempo, Cristina me acompaña en mi camino. Ahora lo pienso y no sé cómo me habría enfrentado a todas las adversidades que he tenido en éste tiempo sin su compañía. Ojalá haberla conocido antes, aunque nunca es tarde.
Me ha enseñado y lo sigue haciendo, a sentir más la vida y a pensarla menos.
Me ha cambiado la forma de mirar...y espero que lo siga haciendo.
Gracias infinitas.